Ana Clara Schindler vive con alegría a pesar de tener una enfermedad degenerativa, viaja por el mundo predicando la palabra de Dios. A sus seis meses de nacida, le diagnosticaron Atrofia Muscular Espinal, una rara enfermedad degenerativa que interfiere con el cuerpo. Recibió a Jesús a los 14 años. «Yo sabía que Dios existe pero mi familia trataba de sanarme de alguna forma, y yo estaba tranquila , contó en una entrevista con Guiame.

Dios es real.

Una amiga le presentó a Ana Clara a un Dios real, porque a Dios no le importa la apariencia física sino lo interior. Años después de su conversión, Ana Clara se dedicó más a Dios y al estudio de la Biblia. Su interés en las misiones surgió cuando vio un video de un misionero orando por un hombre con dificultades motoras y el hombre fue sanado.

Entonces, Ana sintió internamente que su «llamado» había cobrado sentido, motivándola a inscribirse en una escuela misionera. Su primer viaje misionero fue en medio de la pandemia de COVID-19, un momento difícil. Esto muestra su decisión y compromiso vocacional, a pesar de las dificultades. Mucha gente no podía creer que fuera debido al riesgo de la pandemia. Pero Ana tenía una «palabra de parte de Dios».

Ana Clara predica la palabra de Dios.

Dios me da las fuerzas, para predicar la palabra de Dios, porque yo soy instrumento del Señor. Dios quiere obreros dispuestos para trabajar en su obra, con un corazón humilde y no de labios. Después de tres años, de venir trabajando en la obra del Señor, Ana Clara ha viajado cinco veces predicando y el sexto viaje será a Japón.

Aunque requiere mucho cuidado debido a su enfermedad, pero está siendo monitoreada. En el ámbito profesional, Ana dijo que pasó por situaciones difíciles y nunca pensó que pudiera trabajar en una productora audiovisual. La gente piensa que cuando uno tiene discapacidad, ya no podemos trabajar, lo cual es falso.

Fuente: Aepmp News