Hombre perdona al asesino de sus padres tras conocer a Cristo, a temprana edad de 7 años, Bosco presenció impotente el asesinato de sus progenitores durante un cruel ataque. En 1993, se desató un conflicto bélico en Burundi, una nación empobrecida del este de África. La violenta confrontación entre las etnias hutu y tutsi resultó en la trágica muerte de más de 300.000 personas, incluyendo a niños que fueron reclutados como soldados. Fue en este entorno hostil donde creció Bosco Mutebutsi.

Hombre experimentó un cambió radical tras conocer a Cristo.

Él y su hermana mayor lograron sobrevivir y huyeron al pantano. Poco después encontraron refugio en una iglesia local. En los años posteriores, Bosco experimentó una profunda desesperación como consecuencia del trauma. En una entrevista con Bible League International, una organización que distribuye Biblias en todo el mundo, expresó: «En ese momento me sentía realmente desesperado.

El corazón del huérfano se vio invadido por una profunda amargura y tristeza. El único propósito que ocupaba la mente de Bosco era el de buscar venganza, persiguiendo incansablemente al responsable de arrebatarle la vida a sus padres. «Todo lo que anhelaba era concluir mis estudios, enrolarme en el ejército, adquirir un arma y emprender la búsqueda de aquella persona que segó la existencia de mis progenitores».

A los 19 años, la vida de Bosco experimentó un cambio radical al encontrarse con Jesús. Este encuentro transformó por completo sus planes y perspectivas. Su corazón, antes lleno de dolor y sed de venganza por la pérdida de sus padres, fue sanado por la esperanza que encontró en Cristo. El perdón se apoderó de él, permitiéndole liberarse del peso de la amargura y el deseo de venganza. Bosco pudo perdonar a la persona responsable de la muerte de sus padres, gracias al poder restaurador de Dios en su vida.

Numerosos estudiantes han aceptado a Cristo.

A sus 38 años, Bosco representa una fuente de esperanza al dedicarse a la enseñanza de la Biblia a niños y jóvenes en las escuelas de Burundi, en colaboración con la Liga Bíblica Internacional. Para él, la esperanza radica en la fe en Jesús y en la certeza de que Él tiene un camino mejor para cada persona, distinto al sufrimiento experimentado en la vida. Bosco reconoce que no es el único que ha vivido los estragos de la guerra civil, ya que muchos jóvenes y adultos aún cargan con las secuelas de aquel conflicto, expresó el profesor cristiano.

Una vez que encuentren a Jesús y edifiquen sus vidas sobre Él, experimentarán una renovada esperanza y un futuro prometedor a medida que aprendan a depositar su confianza en Él», agregó. A través de clases de Biblia, numerosos estudiantes han aceptado a Jesús como su Salvador. «Estamos observando que la gran mayoría de ellos se acercan a Cristo y se integran a iglesias locales, continuando así su crecimiento espiritual y manteniendo viva la esperanza de la eternidad.

Desde el año 2018, la Liga Bíblica Internacional ha tenido un impacto significativo en la vida de numerosos jóvenes en Burundi, quienes han experimentado una transformación a través del mensaje del Evangelio. Con un alcance que ha llegado a más de 88.000 personas, la Palabra de Dios ha sido difundida a través de estudios bíblicos, generando un impacto profundo en la sociedad burundesa.

Fuente: Aepmp News