Científico ateo de la Nasa se convierte a Cristo, Rob Webb, originario de Estados Unidos, tuvo una infancia en la que no tuvo contacto con el Evangelio debido a que su familia era atea. Fue en la adultez cuando tuvo su primer encuentro con la Palabra de Dios. Antes de su conversión, se identificaba como un «ateo militante» y disfrutaba debatiendo con personas de fe cristiana. En aquel entonces, sostenía la creencia de que el cristianismo era una religión para individuos débiles y carentes de intelecto, considerándola una negación de la realidad.

Científico.

Después de haber sentido pasión por el espacio y los cohetes desde temprana edad, Rob tomó la decisión de seguir sus sueños al graduarse de la escuela secundaria. Para lograrlo, se inscribió en la prestigiosa Universidad Aeronáutica Embry-Riddle (ERAU) para estudiar Ingeniería de Cohetes. En el año 2011, el recién graduado logró obtener su primer empleo en el campo de la ciencia espacial. ¿Alguna vez se ha preguntado cuántos cristianos trabajan actualmente en esta industria? Lamentablemente, son muy pocos.

De hecho, la mayoría de las personas con las que colaboré no profesaban la fe en Dios y, en caso de hacerlo, no aceptaban plenamente todos los preceptos de la Biblia. Él se desempeñaba como científico, inmerso en el estudio de la ciencia, hasta que un amigo de la universidad lo convidó a leer y debatir un libro cristiano que abordaba temáticas sobre Dios, la ciencia y el espacio. Consciente de mi arraigado interés por la ciencia, particularmente en lo concerniente al espacio, mi amigo utilizó dicho libro como medio para abogar en mi favor.

Palabra de Dios.

En ese momento, además, disfrutaba de participar en debates con personas cristianas, por lo que accedí a estudiar el libro, aunque principalmente con la intención de cuestionar su fe cristiana. Así fue como comenzó a estudiar del cristianismo, con la intención de molestar a su amigo. No obstante, durante una conversación acerca de la vida después de la muerte, Rob se percató de que carecía de conocimiento sobre lo que sucedería una vez que falleciera. En su interior, comprendió que no tenía la certeza de acceder al cielo.

El creyente aprovechó la oportunidad para compartir el Evangelio con el científico. En esa ocasión, mi querido amigo logró expresar claramente el mensaje de salvación, de una manera que finalmente pude comprender. Se enfocó en la ley de Dios, destacando el conocimiento del pecado (Romanos 3:20). Fue en ese momento que todo cobró sentido para mí y me di cuenta de mi condición de pecador que necesitaba la misericordia divina.

Científico se convirtió a Cristo.

Rob ha aceptado a Jesús y ha sido iluminado con la verdad de la Palabra. Por el poder de Dios, él se arrepintió de sus pecados y puso su fe en la obra salvadora de Jesucristo. Cuando se convirtió en cristiano, experimentó una transformación profunda, como si un interruptor de luz se hubiera encendido en su interior, llevándolo de la oscuridad a la luz.

El científico adquirió una Biblia y empezó a meditar, lo que resultó en un cambio radical en su vida. Sintió un repentino deseo de asistir a la iglesia, de brindar ayuda alimentaria a las personas sin hogar y de compartir con todos sus familiares y amigos (literalmente con todos los que conocía) su experiencia sobre Jesús y cómo su encuentro con Dios lo transformó en una nueva persona.

Dos años después, Rob comenzó a desempeñarse como ingeniero jefe de navegación en programas de la NASA. Su labor implicaba la dirección de misiones espaciales hacia destinos como Marte, Júpiter, asteroides e incluso el Sol. Entre las misiones más destacadas se encuentra la Parker Solar Probe, la cual marcó un hito al convertirse en la primera misión en la historia en llegar al sol.

Científico abandono la ciencia para predicar de Cristo.

Cuando la industria espacial comenzó a adoptar y promover ideologías marxistas y la agenda LGBT, se generó un cambio significativo en el ambiente laboral. Para Rob, este nuevo enfoque representaba una desviación de sus valores personales y religiosos. La imposición de creencias religiosas por parte del gobierno y la cultura en general, resultaba contraria a sus convicciones cristianas

El científico cristiano tomó la decisión de abandonar su trabajo en el campo de la ciencia para seguir su vocación en el ministerio, desempeñándose como escritor de apologética. En la actualidad, Rob dedica su tiempo a asistir a jóvenes cristianos interesados en disciplinas como la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, brindándoles apoyo para que puedan afianzar su fe.

Se requiere un mayor número de cristianos comprometidos con una base bíblica para contribuir al avance en el campo de la ciencia espacial, al igual que en todas las demás áreas científicas. La Biblia declara que toda sabiduría y conowscimiento se encuentran en Cristo, quien es inmutable (Hebreos 13:8) y sostiene el universo entero con su poderosa palabra (Hebreos 1:3).

Fuente: Aepmp News