ANCIANA DICE, QUÉ VAYA DONDE VAYA SEGUIRÁ PREDICANDO DE CRISTO
Una anciana dice, qué vaya donde seguirá predicando la palabra de Dios a la gente. A través de su perfil en redes sociales, ella comparte mensajes cristianos y habla de la Biblia, logrando llegar a una audiencia de más de 1 millón de seguidores. En una publicación reciente, se le ve conduciendo por las calles mientras saluda a la gente y les brinda mensajes de aliento.
Anciana insta a ser mensajeros de Dios.
El video compartido por D. Marlene, que ha recibido casi 90 mil me gusta, muestra a una persona caminando y ofreciendo pequeños gestos de amabilidad a quienes mantienen el orden en la ciudad. En su mensaje, D. Marlene nos invita a ser mensajeros del amor divino en nuestras palabras y acciones, llevando el amor de Jesús en cada paso que damos.
D. Marlene se acerca a una persona con cortesía y educación, saludándola con un cordial «¡Buenos días!». Mostrando interés por conocer a la persona, le pregunta con ternura: «¿Cuál es su nombre?». Escucha atentamente la respuesta y, con un gesto amable, pronuncia el nombre de la persona: «Carlos, que Dios te bendiga y te guarde». Además de su buen deseo, D. Marlene comparte un consejo con Carlos, expresando su opinión de manera respetuosa: «Mira, no es bueno estar solo», «Búscate una esposa».
Anciana comparte la palabra de Dios en supermercado.
D. Marlene expresa a su acompañante su convicción sobre la importancia de hablar de Jesús en cada oportunidad. Le comenta que incluso cuando va al supermercado, después de realizar sus compras, siempre guarda chocolates. Recuerda la última vez que D. Marlene entabló una conversación con una joven a la que preguntó amablemente: «Querida, ¿alguna vez has oído hablar de Jesucristo?».
Y continuó: «Jesús le ha enviado este dulce para endulzar su mañana y para recordarle el siguiente mensaje que Él me ha pedido que le entregue: si necesita algo, llámelo a gritos». Tras transmitir el mensaje, la señora Marlene se retiró. «Esta es su forma de predicar dentro del supermercado». Su dedicación y compromiso con la fe son dignos de admiración. La manera en que comparte el amor de Jesús con los demás, incluso en lugares cotidianos como un supermercado, es un ejemplo a seguir.
Fuente: Aepmp News