Varias iglesias en Nepal se han derrumbado tras el devastador terremoto de magnitud 6,4 que sacudió la semana pasada partes remotas del oeste del país del sur de Asia. Este desastre ha causado una destrucción generalizada y ha cobrado la vida de más de 150 personas, según informes de grupos cristianos. El terremoto ocurrió poco antes de la medianoche del 3 de noviembre, hora local, y tuvo un impacto significativo en los distritos de Jajarkot y West Rukum, ubicados a unos 300 kilómetros al oeste de la capital, Katmandú.

Varias iglesias destruidas en terremoto.

Según los informes de los medios, los temblores también se sintieron en ciudades cercanas como Delhi, en la India. Las autoridades locales y nacionales están trabajando arduamente para evaluar los daños y brindar asistencia a las comunidades afectadas. Se han desplegado equipos de rescate y se están coordinando esfuerzos para garantizar la seguridad y el bienestar de los afectados. Además, se están llevando a cabo labores de reconstrucción para restaurar la infraestructura dañada y proporcionar apoyo a largo plazo a las personas afectadas por esta tragedia.

Las agencias misioneras cristianas internacionales GFA World y Barnabas Aid, con sede en Estados Unidos, han comunicado recientemente sobre los daños significativos sufridos por las estructuras religiosas en las zonas afectadas. Según KP Yohannan, fundador de GFA World, varias iglesias asociadas en las áreas golpeadas por el terremoto han quedado «destruidas». Además, se ha informado que en una aldea específica, lamentablemente, tres miembros de la iglesia perdieron la vida.

Según las estimaciones de GFA World, hasta el 90% de las viviendas sencillas construidas con adobe y ladrillo.

GFA World informó que su enfoque se ha centrado en la movilización de los miembros de las iglesias locales para llevar a cabo operaciones de rescate y socorro. Han proporcionado suministros esenciales como alimentos, mantas y tiendas de campaña a las miles de personas afectadas. Dado que muchas de las aldeas afectadas se encuentran en ubicaciones remotas y son inaccesibles para los vehículos regulares, los trabajadores de la iglesia han recurrido al uso de motocicletas para llegar y brindar ayuda a estas comunidades. Según las estimaciones de GFA World, hasta el 90% de las viviendas sencillas construidas con adobe y ladrillo en algunas áreas se han derrumbado.

Barnabas Aid ha informado sobre la situación crítica que atraviesan los cristianos en Nepal tras el terremoto. Según un socio local, más de 18.000 hogares y al menos 20 iglesias han sido destruidas. Tanka, un colaborador del proyecto en el oeste de Nepal, ha declarado que la pérdida de hogares ha provocado una grave escasez de alimentos y malas condiciones de vida. Además, las personas se encuentran expuestas a temperaturas bajo cero, lo que agrava aún más la situación.

Según el testimonio de Tanka, un Pastor local cuyo nombre es Judha, se ha informado que lamentablemente ha perdido a cinco miembros de su familia en el trágico terremoto. Entre las víctimas se encuentran su hija y cuatro de sus nietos. Esta devastadora pérdida ha dejado a la comunidad cristiana en una situación sumamente difícil, ya que los esfuerzos de ayuda por parte del gobierno no han llegado a la reconstrucción de la iglesia.

Terremoto ocurrido el 3 de noviembre.

Un trabajador de Barnabas Aid, identificado como Mahón, transmitió el agradecimiento de quienes reciben ayuda de los organismos internacionales en este momento de crisis. El hospital local de Jajarkot sigue lleno de heridos, lo que llevó a las autoridades a transportar por vía aérea a algunas víctimas a Katmandú para recibir tratamiento. La sobreviviente Geethakumari Bista compartió con la BBC su desgarradora experiencia tras el terremoto que sacudió Nepal.

Lamentablemente, su familia quedó sepultada bajo los escombros de su casa derrumbada, lo que provocó la trágica pérdida de su hija menor. Afortunadamente, su hija mayor fue rescatada. Los esfuerzos de búsqueda y rescate se enfrentan a importantes obstáculos debido a los deslizamientos de tierra que han bloqueado muchas carreteras. Después del terremoto inicial del 3 de noviembre, se sintieron tres temblores más en una hora.

Los usuarios de las redes sociales y los medios de comunicación locales difundieron imágenes de la destrucción, mostrando a los ciudadanos buscando desesperadamente a supervivientes. Tras el sismo que ocurrió el 3 de noviembre, se registraron tres réplicas en un lapso de una hora. Las redes sociales y los medios de comunicación locales se encargaron de difundir imágenes de la devastación, donde se observaba a la población en busca de personas con vida. La magnitud del desastre fue evidente, y las autoridades trabajaron arduamente para brindar asistencia a los afectados.

Fuente: Aepmp News