Los padres Jesse y Bethany Morgan hallan el diario de oración de su hija después de su trágica muerte en un accidente ocurrido en los Estados Unidos. Durante unas vacaciones familiares en Maine, Lucy, de 6 años, sufrió graves heridas en el cráneo mientras jugaba al bádminton con sus hermanos.

Niña falleció producto de un accidente.

El mango de la raqueta, que estaba siendo utilizado por su hermano de 10 años, se rompió accidentalmente e impactó a Lucy en la cabeza. Según explicó Jesse en una serie de publicaciones en su blog, New Creation Living, la raqueta se rompió en el momento en que descendía, lo que ocasionó que un fragmento afilado penetrara en el cráneo de Lucy mientras se encontraba sentada en la banca, provocándole lesiones catastróficas.

Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos por salvarla, la pequeña Lucy no logró recuperarse de las graves lesiones sufridas en el accidente. A pesar de haber sido rescatada y trasladada a un hospital local, su estado de salud empeoró rápidamente, lo que llevó a su traslado a un hospital en Portland. A pesar de la dedicación del personal médico y de las fervientes plegarias de sus seres queridos, cuatro días después del trágico suceso, Lucy falleció.

Padres de la niña descubrieron el diario de su hija tras su muerte.

Tras el regreso de la familia a Nueva Jersey, los padres descubren el diario de oración de su hija en su mochila. El cuaderno le fue entregado por su madre un mes antes de que Lucy falleciera. Esta iniciativa fue de mi esposa, quien es periodista. Ella me sugirió: «Oye, puedes usar esto para escribir cosas, escribele a Dios si quieres».

El hallazgo del diario ha conmovido profundamente a la familia, quienes ahora valoran cada palabra escrita por Lucy como un tesoro invaluable. El periódico reveló la profunda fe y el amor de la niña por Dios, lo cual sirvió de consuelo a sus afligidos padres. La magnificencia de Dios es asombrosa, Él es el Dios verdadero que creó todo lo que nos rodea y que, por su inmenso amor, entregó su vida en la cruz para redimirnos de nuestros pecados.

Niña partió a la eternidad.

Es evidente que ella tenía mucha fe, una fe poderosa. En su infancia, Jesús llamaba a los niños a acercarse a Él, y aunque su comprensión era limitada en aquel entonces, uno de los regalos más hermosos que recibí fue descubrir sus escritos y dibujos. El padre declaró que no tiene duda respecto al amor que su hija profesaba por Cristo y por Dios, a pesar de su imperfecta comprensión de la vida, y que confía en que ella ha sido acogida en el seno del Cielo.

Jesse, por su parte, manifestó que él y su familia están afrontando su dolor con la ayuda del Señor, encontrando consuelo en la fe y manteniendo viva la esperanza a pesar de la inmensa pérdida que han sufrido. Tras exhaustivos exámenes y repeticiones minuciosas de pruebas, se ha confirmado el diagnóstico de muerte cerebral a la 1:32 am del 5 de junio, y su corazón cesó de latir alrededor de las 4 am. En ese momento, Lucy partió para estar con Jesús.

Es únicamente Cristo quien nos sostiene, es importante resaltar este punto. No deseo que las personas se queden impactadas por la tragedia, sino que puedan percibir lo milagroso en medio de ella. Si bien Dios no realizó un milagro trayéndola de vuelta, sí hizo un milagro en nuestras vidas. Eso es lo que deseo que la gente pueda ver, que a pesar de todo, en nuestros corazones aún confiamos en él.

Fuente: Aepmp News