EL ESPÍRITU SANTO ESCUDRIÑA LO MÁS PROFUNDO DEL CORAZÓN
¿Por qué el Espíritu Santo escudriña el corazón?.
El Espíritu Santo es una de las tres personas de la Trinidad, junto con el Padre y el Hijo. En la Biblia, se nos dice que el Espíritu Santo es enviado por Dios para ayudarnos, guiarnos y fortalecernos en nuestra vida cotidiana. Pero ¿por qué el Espíritu Santo escudriña el corazón? ¿Cuál es su propósito y significado? En este artículo, exploraremos esta pregunta a través de citas bíblicas.
En primer lugar, debemos entender que el corazón es el centro de nuestra vida emocional y espiritual. Es el lugar donde se toman decisiones, se sienten emociones y se experimenta la presencia de Dios. En Proverbios 4:23 se nos dice: «Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida». Esta es una clara indicación de que el corazón es importante y debe ser protegido.
El Espíritu Santo escudriña el corazón.
El Espíritu Santo escudriña el corazón porque es el único que puede conocerlo completamente. En 1 Corintios 2:10-11 leemos: «Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios». Aquí se nos dice que el Espíritu Santo es capaz de revelarnos las cosas profundas de Dios y también de nuestro propio ser.
Además, el Espíritu Santo escudriña el corazón para ayudarnos a crecer espiritualmente. En Romanos 8:26-27 se nos dice: «Y de igual manera también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos». Aquí se nos dice que el Espíritu Santo intercede por nosotros cuando no sabemos cómo orar y que Dios conoce nuestras intenciones.
La palabra de Dios es viva y eficaz.
Finalmente, el Espíritu Santo escudriña el corazón para purificarlo y santificarlo. En Hebreos 4:12-13 leemos: «Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y aun el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta». Aquí se nos dice que la Palabra de Dios es capaz de penetrar hasta lo más profundo del corazón y discernir nuestros pensamientos e intenciones.
En resumen, el Espíritu Santo escudriña el corazón porque es el único capaz de conocerlo completamente. Lo hace para ayudarnos a crecer espiritualmente, interceder por nosotros y purificarnos. Debemos estar abiertos a la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas y permitirle que nos guíe hacia una mayor santidad y comunión con Dios.
Fuente: Aepmp News